Seria exagerar mucho con respecto
al título que puse en el post, pero un 4 de Julio, todo el mundo sabe que es el día de la
Independencia de Estados Unidos, "America" para los angloparlantes. Para los cinefilos, es el día donde
Will Smith salvo el planeta de extraterrestres, es por lo que tengo entendido, a pesar de no haber visto esa película por ahora.
Pero para los futboleros, en especial los old school, es el día donde marca el natalicio de la "Saeta Rubia", el gran Alfredo Di Stéfano. Uno de los grandes héroes del fútbol mundial y alto killer de área a mediados del siglo XX, hecho ocurrido en 1926.
Pero para los futboleros, en especial los old school, es el día donde marca el natalicio de la "Saeta Rubia", el gran Alfredo Di Stéfano. Uno de los grandes héroes del fútbol mundial y alto killer de área a mediados del siglo XX, hecho ocurrido en 1926.
Pese a que este post no se trata de esta leyenda oriundo de Barracas, escribo lo que a mí me llego a destacar esta fecha como el “Día Internacional del Fútbol”. Fueron tres finales de selección, tres historias diferentes, tres épocas diferentes, donde quedaron marcaron con letras doradas el balompié, no solo en sus
respectivos países, sino en el concierto futbolístico mundial.
- ·
Copa Mundial de Fútbol, Suiza 1954: “El milagro
de Berna”
Domingo 4 de julio de 1954, ciudad de Berna, Suiza.
La cancha del Wankdorf-Stadion estaba preparada para lo que era la arrolladora maquina de Hungría, enfrentándose a esforzada Selección de Alemania Federal. Este partido no se hizo esperar, el inglés William Ling daba el pitazo inicial, ante más de 60.000 almas, incluyendo a los jugadores, cuerpo técnico y funcionarios en el estadio de Berna, a estar concentrados en un duelo que sería épico.
A pesar de que los alemanes partieron, el favoritismo húngaro no se hizo esperar, pues a los 6 minutos iniciado el partido, vino en los pies de su capitán y máximo referente, Ferenc Puskas el primer gol del encuentro. Como si fuera poco, Zoltan Czibor aumentó la ventaja dos minutos después, ya dando por hecho el segundo título de la selección roja, si consideramos la medalla de oro en Helsinki, Finlandia, ganada dos años atrás.
Pero Alemania no se daba por vencida y supo reaccionar rápido el 0-2 en contra. Pues su goleador, oriundo de Núremberg, Maximilian Morlock no desaprovechó su oportunidad descontando a los 10’, venciendo al portero Gyula Grosics. A los 18’, 'El Jefe' Helmut Rahn emparejo el encuentro, dejando la incertidumbre entre los asistentes, de ahí en más, ninguno de los dos equipos supieron vencer la valla rival, a lo largo de los 27 minutos que quedaban y por eso, se fueron al entre tiempo 2 a 2.
El descanso ...
- · Eurocopa, Portugal 2004: “Desde el Olimpo, a la conquista da Luz”
- · Copa América, Chile 2015: “No hay mal que dure 99 años”
